MÉRIDA, Yuc.- Desde hace varios días se viralizó la historia de Max, un perro que fue atado y abandonado en la banca de un parque de la Ciudad de México, junto a una carta en la que el ex dueño, un menor de edad, pedía que lo cuidaran pues no podía mantenerlo.
El caso conmovió las redes sociales y se compartió las fotografías del perro junto a una hoja de papel que tenía el siguiente mensaje: “Por favor adóptame. Max. Por favor te pido que adoptes a este perrito y lo cuides muy bien”. En el texto se decía que el dueño decidió abandonarlo pues sus familiares lo maltrataban.
Finalmente, tras conocerse el caso, la asociación civil Mascotas Coyoacán acudió a la alcaldía de Ixtapalapa para rescatar al can, quien se mostró temeroso y agredía a los rescatistas.
Sin embargo, el perrito ya está resguardado en dicho albergue de la alcaldía de Coyoacán y muy pronto, cuando recupere su buen carácter, será puesto en adopción.
Sacan de un pozo a “Coqueta”
En otro caso, este viernes la Policía Municipal de Ticul recibió un reporte de que en la calle 20 entre 25 y 27 del municipio, una perrita de nombre “Coqueta” estaba extraviada y los dueños pedían yuda.
Los gritos de sus amos hicieron reaccionar al can, quien empezó a ladrar y así se descubrió que estaba en el fondo de un pozo.
Entonces su dueña, María Mendoza, se acercó al pozo gritando de nuevo el nombre de su mascota. Como estaba en lo más profundo de la oquedad, de unos 30 metros de hondo, no se escuchaban bien sus ladridos, hasta que la localizaron en el hoyo.
En seguida la Policía Municipal dio aviso a los elementos de Protección Civil al mando de Enrique Medina Sosa, quienes con sus agentes trataron de ayudar, pero el pozo estaba profundo que fue necesaria la intervención de bomberos, quienes lograron sacar a “Coqueta” con vida.
Con lágrimas en los ojos doña María Mendoza agradeció a la Policía Municipal, Protección Civil y Bomberos que rescataron su mascota.