Muy caro le salió a una familia el colocar un «killer» (insecticida en espiral) para tratar de combatir a los mosquitos y otros bichos en una vivienda en el centro de Torreón, Coahuila.

En un momento dado el «killer» encendido cayó accidentalmente sobre un sillón de una de las habitaciones y comenzó un incendio que estuvo muy cerca de terminar en tragedia.

Según informes preliminares, Nancy Medina, habitante de la vivienda, encendió dicho insecticida. Minutos después había llamas, que se propagaron con rapidez y alcanzaron otros dos sillones y causaron importantes daños en la estructura de una pared, en la planta baja de la casa afectada.

Además de los daños, dos personas resultaron lesionadas: Jazmín Canales, de 28 años, sufrió quemaduras y fue trasladada a la clínica 71 para recibir atención médica especializada. Por su parte, Nancy Medina fue llevada a la clínica 46 con golpes leves.

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