Con el rostro bañado en sangre encontró la Policía a una mujer que, por andar ebria hasta las chanclas, derrapó con su moto en la carretera Ticul-Pustunich, justo frente a una gasera.
El accidente se registró poco después de las 9 de la noche del domingo y cuando llegaron los agentes de la Policía Municipal de Ticul vieron tirada en el pavimento a una dama con la cara cubierta de mole y rápidamente solicitaron una ambulancia para trasladar a la mujer.
Se averiguó en el lugar de los hechos que Nidia D. T., al parecer, salió de la comisaría de Pustunich rumbo a la cabecera municipal, pero debido a tanto alcohol ingerido la damita cerró un instante los ojitos, por lo que perdió el control de su nave de dos ruedas, derrapó y estampó su jeta en la carretera.
Por el trancazo, su cara quedó floreada, con heridas leves pero profundas, de donde salía abundante sangre con olor a alcohol.
En minutos llegó una ambulancia de la SSP con base en Oxkutzcab, pero el viaje fue en vano, pues doña Nidia se negó a ser atendida por los paramédicos y exigía a gritos la presencia de una mujer, ya que solo ellas la podían tocar, porque “los policías son malos”.
Aunque los paramédicos querían revisar las heridas de la “chupitos”, ésta se puso impertinente, así que una unidad de la Policía la trasladó al Centro de Salud.