La nave Sonic, cuyo conductor causó todo el relajo, fue la que se llevó la peor parte en la “potazo”  de ayer en el fraccionamiento Brisas.

Redacción/De Peso
MÉRIDA, Yucatán.- Una verdadera “desgraciadez” ocurrió ayer por la mañana en el fraccionamiento Brisas porque ocurrió un accidente de tránsito que si bien no dejó lesionados, sí dejó como resultado saldos aparatosos, destrozos al por mayor, incluyendo un poste de luz que terminó partido en tres, además de que una señal de nomenclatura fue derribada.

El ranazo ocurrió por la imprudencia del guiador de un Sonic de placas YWC179A, quien jalaba sobre la calle 35 de ese rumbo y cuando llegó a la esquina de la calle 16-Diagonal no respetó la señal de alto. Fue en ese momento que se reventó contra un Versa de matrícula YZW573B que iba con preferencia de paso.

El fuerte impacto hizo que el Sonic saliera proyectado en reversa y chocara contra una señal de nomenclatura, a la cual derribó, y de paso se fue de nachas contra un poste de concreto de la CFE que fue arrancado de su base, además de que el golpe hizo que se partiera en su parte superior.

Los involucrados resultaron con sacudidas hasta en el occipucio y sus alrededores, pero al parecer no tenían nada grave, pero de todas formas fueron valorados por paramédicos.

Lo que hubo que hacer de inmediato fue llamar a las aseguradoras para que los ajustadores platicaran y se viera cómo iba a solucionarse todo, pues no se habló únicamente de los daños en los vehículos, sino también en el mentado poste que de pura chiripa no cayó y causó una desgracia peor.