Daba mucha pena ver el deplorable estado en el que terminó el Matiz, cuyo guiador no respetó la distancia y ocasionó la carambola.
Redacción/De Peso
MÉRIDA, Yucatán.- Hasta dolor de estómago daba nomás de ver el estado en que quedaron dos de tres vehículos que estuvieron involucrados en una carambola ocurrida ayer en la avenida Itzaes entre calles 41 y 43. El menos perjudicado del trío tenía daños casi imperceptibles, pero daños a final de cuentas que no dejaron lesionados. Eso sí, paramédicos de la Cruz Roja valoraron a todos para descartar cualquier peligro.
Lo que se averiguó fue que ayer por la tarde iba don José Santos Rodríguez trepado en su Matiz de matrícula YXK498B con dirección al norte sobre Itzaes, y mero en el cruce que le indicamos no se percató a tiempo de los vehículos que estaban detenidos delante de él por orden de la luz roja del semáforo, y por no frenar como se debe ¡rájale!, de nariz tronó como sapo contra el trasero de un Mystique de numeral YZM555A, manejado por una señora que por el impacto se fue con todo y nave hacia adelante, y chocó contra la parte posterior de un March de placa ZBH592B, al mando de otra fémina.
Llegaron elementos de la Policía estatal para controlar la vialidad de la zona y para tomar nota de lo ocurrido, solicitándose la asistencia de paramédicos, llegando los de la Cruz Roja que valoraron a conductores y pasajeros, quienes nomás estaban asustados y levemente sacudidos. Lo que procedió finalmente fue pedir la presencia de los representantes de las aseguradoras para que se hicieran cargo de los daños, sobre todo del Matiz y el Mercury que quedaron para ponerse a chillar.