Redacción/De Peso
MÉRIDA, Yucatán.- Nomás las llantas se medio salvaron en una camioneta de placas YS7375A que ardió en llamas en la glorieta de la calle 70 con 11-C del fraccionamiento Gran Santa Fe. Además, una planta de energía que estaba en la parte trasera también quedó tostada.

Lo que se supo en el sitio de la quemazón fue que unos chambeadores rolaban en este vehículo y de pronto en la glorieta mencionada empezó a quemarse el motor.

Lo bueno fue que el guiador logró orillarse y bajaron todos, y en cuestión de segundos la nave ya estaba convertida en bola de fuego.

Llegaron a toda velocidad los bomberos y empezaron a soltar sus buenos chorros de agua hasta acabar con la bronca.

Lo malo fue que el daño ya estaba hecho y tanto el vehículo como la planta que llevaba a cuestas quedaron en calidad de chicharra, así que empezó a averiguarse si había aseguradora que respaldara los daños que fueron aproximadamente del 99.9 por ciento.