Enrojecidos por los piquetes de abejas africanizadas pero también por el coraje quedaron varios habitantes de Kinchil este martes por la tarde.
Resulta que insectos de un apiario de la colonia Japón de buenas a primeras atacaron a por lo menos ocho personas entre niños y adultos. Por suerte nadie fue herido de gravedad.
«Desde hace dos semanas hicimos la queja a la policía para que este señor «Fito» mueva su apiario a otro monte o más lejos de donde vivimos», dijo Maricela «N», una de las afectadas.
Al sitio arribaron elementos de la Policía Municipal y bomberos del carropipa 793 de la SSP, a cargo de Juan Pech Cauich.
Pasado el susto y atendido todo mundo, afectados caminaron tres calles hasta llegar al domicilio de don Manuel (a) «Fito», quien al ver lo que había pasado se comprometió a traspasar en una semana su apiario.
«Ojalá sea antes, no podemos esperar mucho tiempo, tengo hijos y nietos que han sido atacados» señaló al reportero otro afectado.
