Como un caso sin precedente, un menor de 12 años revivió la historia de Caín y Abel al asesinar a su hermano adoptado de cuatro años, este miércoles en la Ciudad de México.

Como informamos con anterioridad, el chavito de 12 años identificado como Jorge ‘N’, asesinó a su hermano, quien había sido adoptado años atrás, con siete puñaladas realizadas con un cutter a la altura del pecho en la calle Refugio en la colonia Nativitas de la alcaldía Benito Juárez.

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El cruel homicidio ocurrió la noche de martes en la casa del reconocido pintor Daniel Lezama, en donde presuntamente Jorge hizo un corte en el cuello del niño de unos 15 centímetros con un cutter y luego se lo enterró al menos siete veces en su cuerpecito.

Al terminar su crimen tapó al menor con una cobija como si estuviera durmiendo. Hasta la mañana de este miércoles la nana de los menores -quien también cuidaba al resto de los hermanos: Miguel Ángel, de 17 años; Carolina y Hazel, ambos de 10 años- descubrió el cuerpo ensangrentado del menor.

Al lugar arribaron elementos de la Cruz Roja, quienes no pudieron hacer nada por salvarle la vida al niño, pues las heridas con el arma punzocortante fueron directas al corazón.

Luego de confirmarse la muerte de este pequeño, llegó personal del Servicio Médico Forense (Semefo) para llevar a cabo las diligencias correspondientes y hacer el levantamiento del cadáver.

Durante la confesión del presunto homicida confesó que lo asesinó porque sentía celos de él ya que sus padres le ponían más atención al niño de 4 años que al resto de sus carnales.

Extraoficialmente se averiguó que Jorge asistía a terapia por problemas de conducta en contra de sus hermanos adoptados.

El menor podría ser procesado en los próximos días por el delito de homicidio calificado, pero por tratarse de un menor su castigo máximo sería de seis años, tiempo en el que cumpliría la mayoría de edad.