MÉRIDA, Yuc.- En el juicio que se lleva contra el chiapaneco-estadounidense, Alberto H.R., alias “Gringo Loco”, quien disparó a su víctima en el Centro de Mérida, se señala que el móvil fue una discusión porque estacionaba mal su camioneta, afectando a los vecinos.

Luego de que dicho sujeto fue vinculado a proceso, salió a relucir que el “Gringo Loco”, de 71 años, es vecino del rumbo y ha destacado por su prepotencia y constantes roces con la gente que vive por ahí, ya que a la menor provocación saca una pistola para amedrentar. 

Al parecer, sirvió en las fuerzas armadas de Estados Unidos y se encuentra casado con una mujer de ese país, por lo que cuenta con doble nacionalidad. 

Como dimos a conocer, entre las 16:30 y 17:30 horas del pasado lunes 20 de diciembre, el ahora procesado se encontraba en la calle 68 entre 71 y 73 del Centro, circulando a bordo de su camioneta. 

Al tratar de estacionarse sobre esta arteria, se le emparejó el lesionado J.P.G.L., a bordo de su bicicleta. 

Éste último le pidió que no dejara en ese lugar su vehículo, pues afecta a las familias del rumbo y comenzaron a discutir.

En un momento dado, el sujeto sacó una pistola y le disparó a bocajarro al hoy hospitalizado, ingresando el proyectil en el cuello y salió por el cuello, provocándole lesiones que ponen en peligro la vida.

Cobardemente, el tipo huyó y dejó estacionado su vehículo en la cochera cubierta de una mujer estadounidense, que también vive en la zona y se refugió en otro lugar, hasta que finalmente sus protectores dieron a conocer a las autoridades su paradero y se le detuvo.

Ahora, el juez de control Rómulo Antonio Bonilla Castañeda accedió a imputarlo y le impuso la medida cautelar de prisión preventiva oficiosa por todo el tiempo que dure su proceso.