Hasta el mofle se le cayó a la camioneta Patriot después de dar un giro completo por el impacto que le dio el Chevy.

Redacción/De Peso
MÉRIDA, Yucatán.- Como si fuera ballet, así fue el choque ocurrido ayer por la tarde en la esquina del Hospital Militar Regional, y decimos ballet porque uno de los vehículos involucrados giró como si hiciera un paso de danza luego de que lo lanzó la otra nave involucrada, pero cuál danza va a ser, fue en realidad puro desastre con daños materiales incluidos y cero lesionados.

Le contamos que sobre la calle 61-A de poniente a oriente iba un don tras el volante de su Jeep Patriot de matrícula YWV775A, quien llegó al cruce con la 90, frenó ante la señal de alto, vio que no venía nada y avanzó, brincó la vía del tren, y ahí la regó porque no extremó precauciones en dicho cruce, ya que por la izquierda se aproximaba el Chevy con placas ZCU166A, cuyo conductor no pudo frenar a tiempo debido a que iba con preferencia de paso en el momento en que se le atravesó la camioneta.

Como resultado, el frente del Chevy tronó grueso contra el costado izquierdo de la Patriot, la cual giró como pasito de ballet y quedó atravesada metros adelante, con daños en el sitio del guamazo y con el mofle en el pavimento. Sin embargo, al auto compacto le fue peor porque quedó dañado del motor, a tal grado que soltó cuanto líquido llevaba dentro, que quedó regado en el asfalto. El sitio de volada fue asegurado por agentes de la SSP que pidieron el apoyo de bomberos para limpiar ese lugar de manera segura y eficaz antes de que hubiera más percances. Las aseguradoras se hicieron cargo de todo lo correspondiente a los destrozos, y buena onda que no hubo lesionados.