Destrozos gachos dejó el trancazo que se dieron un autobús de ruta 63 Periférico y una camioneta, en la esquina de la calle 44 con 61 del segundo cuadro de Mérida, bien cerquita del Centro de la ciudad. La culpa de este percance fue del guiador del vehículo más chirris, por no respetar bien la señal de alto.

De Peso Yucatán estuvo en el sitio de los hechos, y ahí supimos que la camioneta blanca jalaba de sur a norte sobre la 44, y al llegar a la 61 el guiador se detuvo parcialmente ante la señal de alto, pero siguió avanzando lentamente para asomarse más, un poquito más, un poquito más hasta que ¡crunch!, se la reventó un autobús que circulaba en la 61 hacia el Centro con paso libre.

El guamazo no sólo giró parcialmente a la camioneta, sino que además la destrozó del frente, aunque el autobús también se llevó lo suyo, sin que nadie resultara lesionado.

Eso sí, tuvieron que caer los bomberos para echar aserrín sobre los líquidos derramados, a fin de que no quedara el pavimento resbaloso y se fuera a dar otro accidente.

Además, llegaron agentes policiacos para controla la vialidad, y peritos de tránsito para deslindar responsabilidades.