Nuevamente, los semáforos del Centro aparecen como los culpables de un choque que se registró este viernes en la tarde en la calle 53 por 58, o al menos así lo consideraron dos guiadores que chocaron entre sí, pues cada uno de ellos juraba y perjuraba que tenía luz verde, o sea, un auténtico semaforazo.

El conductor del Attitude con placas YZP431B transitaba tranquilamente sobre la calle 53 con dirección hacia el poniente, y al llegar al cruce con la calle 58 cruzó la arteria, pero fue impactado por un sujeto que iba al mando del Beat con placas YYP977B, que transitaba sobre la segunda vía hacia el sur.

El trancazo que se dieron provocó que el primer auto girará 180 grados hasta quedar con la «nariz” apuntando hacia el norte, mientras que el Beat se aporreó contra la banqueta de la esquina.

Obviamente, ambos vehículos acabaron con bastantes daños, pues al Attitude se le arrugó todo el costado derecho y es posible que el segundo auto posiblemente no vuelva a andar, pues el motor recibió todo el golpe y hasta las bolsas de aire se activaron.

Los guiadores, que estaban bastante enojados, discutían y aseguraban que ambos vieron que el semáforo que se ubica en dicho sitio les marcaba luz verde; por lo tanto, ninguno de los dos quería aceptar su responsabilidad; es obvio que uno mentía. Lo bueno del caso es que nadie acabó herido y todo se redujo al billete que va a costar reparar los daños de los autos.

Policías Municipales llegaron, como siempre, a prestar auxilio a los involucrados, al igual que un perito de tránsito de la misma corporación policiaca para deslindar responsabilidades o, en su caso, asesorar a los «encabritados” guiadores.