Redacción/De Peso
MÉRIDA, Yucatán.- Con las cuatro llantas mirando al cielo terminó ayer por la noche un Chevrolet Spark, placas YXG—616—B.
El guiador de este compacto conducía sobre el carril interno del Anillo Periférico y metros antes de llegar al kilómetro 47 le pegó leve rayón a un Volkswagen Passat y por el golpe el guiador perdió el control y terminó volcado en un área verde de una cuchilla.
El afectado, que viajaba con su doñita en el Volkswagen, dijo que el guiador del Spark salió del auto herméticamente «pedernal» o sea hasta las manitas de briago.
Al parecer, otro vehículo se detuvo en el costado de la carretera y «levantó» al borrachito para huir del lugar de los hechos.
La nave quedó en completo abandono y los afectados con leve golpe en su vehículo.