Redacción/De Peso
MÉRIDA, Yucatán.- El alcalde de Samahil, Isaías Salomón García Aguayo, tuvo que comparecer ante el juez de control de Umán, mediante el uso de la fuerza pública, por el delito de fraude, al haber expedido un par de cheques de hule que rebotaron como pelotas de ping pong.
La comparecencia del edil, prácticamente se dio a la “fuerza”, ejecutándola personal de la Policía Estatal de Investigación en cumplimiento de una orden del juez de control de Umán.
Cabe mencionar que el delito de fraude, en cualquiera de sus montos, en el Nuevo Sistema de Justicia Penal, no es considerado grave y no se castiga con pena privativa de libertad.
Por eso, García Aguayo, sólo compareció ante el juez y quedó en inmediata libertad, ya que desde este año todos los funcionarios públicos en el Estado carecen de fuero. El primer edil se había mostrado renuente en acudir ante el juzgador.
Isaías Salomón fue denunciado por el empresario umanense Mario Isidro Dzib, que interpuso una denuncia en su contra por los cheques sin fondos (188/27/2017).
El alcalde aprovechó la amistad que tenía con el empresario y primero le pidió 260 mil pesos prestados, para adelantar el pago de una obra y darle a los regidores para que la aprobaran.
Como garantía de pago le expidió un cheque por esa cantidad, el 17 de agosto de 2016, pero al ir a cobrarlo no tenían fondos.
Al reclamarle, el edil expidió otro papel, el 13 de septiembre, pero no pudo ser cobrado. El afectado ha hecho hasta lo imposible para que le paguen, pero no ha obtenido respuesta positiva.