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Couopina: educación, futuro con consenso

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Couopina: educación, futuro con consenso

Rollo: Felipe Couoh Jiménez
La Nueva Escuela Mexicana (NEM), instrumentada por el actual gobierno Federal con su versión local, aprobada recientemente por el Congreso del Estado de Yucatán, la Ley de Educación del Estado de Yucatán 2020 (LEEY), sin duda tiene aspiraciones legítimas para formar ciudadanos.

Nadie puede negar el significado que tienen los valores en la definición de las concepciones del mundo; las creencias y las conductas de las personas o grupos sociales y, desde luego, tampoco el papel relevante que cumplen los principios éticos educativos en todos los niveles y grados.

De igual forma, consideramos que todos los actores sociales coinciden en que, en la actualidad, existe una fuerte crisis de valores que afecta, herencia maldita de los adultos, a la juventud y los niños. Sin embargo, las diferencias empiezan a surgir cuando se trata de definir cuáles son los valores más importantes y cuando se trata de explicar cuáles son las causas de su crisis.

El debate en torno a los valores implica, además, una discusión sobre lo que es y debería ser el destino de la educación bajo la NEM y su filial la LEEY; se trata de una cuestión que involucra la problemática en varias dimensiones o aristas. Lo que explica de manera amplia, quizás irracional, el rechazo por parte de la Cámara de Diputados de Yucatán, de abrir la modalidad de parlamento abierto, en los prolegómenos de la discusión y posterior aprobación de la normatividad educativa local.

En las reflexiones que siguen se toman en cuenta diversas experiencias de la vida y convivencia académica. A pesar de que la reflexión sobre los valores es muy compleja, se trata tan sólo de indicar algunas cuestiones que parecen claves para expresar en este tan complejo momento en la sociedad yucateca. Así que bien valen dos mosquitas, una por oreja, para tener presente:

La primera es que nuestra realidad cotidiana nos remite a un amplio conjunto de valores con respecto de los cuales se debe optar y, entonces el debate radica en cuáles son los criterios válidos que deben orientar nuestras decisiones.

La segunda es que, desde nuestro punto de vista, el estudio de los valores implica aspectos objetivos; aspectos subjetivos que atañen, por un lado, a las tendencias de la sociedad vigente que acentúa ciertos valores con respecto de otros y a los diversos sistemas de valores sostenidos por individuos o grupos sociales; el problema central es cuáles son las razones que tenemos para sostener unos valores con respecto a otros. El desafío radica en cómo se explica. La comunidad educativa vive en la actualidad, por el consabido C-19 un período especial de cambios en todos los aspectos académicos como el escolar. Sumemos la urgencia de aplicar tecnologías de información y comunicación en el ámbito escolar, que ha dado lugar a un cambio también profundo en todas las formas de la vida educativa.

De manera apretada, atendiendo a los hechos y dichos con anterioridad se destacan los siguientes temas:

Los valores en los niños, jóvenes y adultos, aunada a la situación que atraviesa la sociedad de Yucatán por la pandemia Covid-19. Así, dejemos los apuntes para que, en su caso, ponderemos en la dimensión que merecen esos asuntos.  Requerimos un arduo trabajo educativo de los ciudadanos en comunión con profesores y autoridades en torno a temas como la tolerancia y aceptación de otras formas de ser y pensar, acorde con dictados internacionales que nuestro país tiene signado de manera grata.

Otro aspecto importante es el de la concepción que tienen los jóvenes y niños sobre los valores. Se puede asegurar que ambos, jóvenes y niños, tienen valores arraigados; se comprometen con la realidad, admiran y comprenden a otras generaciones; están bien informados y preguntan a mayores temas libres. Hay experiencias que encuentran en la familia y la escuela, hoy sin aulas con rica convivencia, las bases para solventar los imperativos actuales.

Es necesario reforzar el debate, procurar consenso, en la comunidad de aprendizaje. Ponen el ejemplo, los gobiernos Federal, NEM, y Estatal, LEEY. Así sea, por la nueva ciudadanía.