Durante su labor en El Salvador, Monseñor Gustavo Rodríguez Vega, Arzobispo de Yucatán, en las últimas horas se deshidrató, se le bajó la presión y sufrió una fuerte infección bacteriana y choque séptico.

Afortunadamente, ya se encuentra recuperándose de la enfermedad.

Desde el lunes 13 de febrero el líder religioso de 67 años llegó a El Salvador como parte de la delegación mexicana que asistiría a la Asamblea Sinodal de Centroamérica y México (Camex).

Fue este viernes 17, de acuerdo a un comunicado de la Arquidiócesis, cuando «se sintió indispuesto antes de viajar y acudió al hospital para hacerse estudios. El diagnóstico fue que, a partir de una deshidratación, tuvo una descompensación, una baja de presión y un shock séptico a partir de una bacteria».

Afortunadamente ha podido ser estabilizado en un hospital y hasta este sábado «ha respondido favorablemente a los tratamientos, además de gozar de buen ánimo».

«Los médicos le han recomendado reposar unos días más antes de viajar, hasta que se estabilice completamente» . por lo que el viaje a Roma que tenía programado será suspendido.

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