Los cargadores de teléfono celular pueden ser peligrosos si se dejan conectados, ya que muchos de éstos son elaborados con materiales de dudosa procedencia y sin controles de calidad.

Por ejemplo, los golpes punzantes pueden perforar la cubierta del cargador o éstos pueden recargarse en entornos de altas temperaturas, lo que pudiera desencadenar una reacción que eleve la temperatura hasta el nivel del incendio o incluso la explosión.

En este sentido, aunque cueste un poco más, es completamente recomendable el uso de componentes oficiales para los celulares. Y por supuesto si son elementos oficiales, pero están dañados en las conexiones o se ha roto la superficie, hay que sustituirlos de inmediato o se generará una explosión como la captada en este video:

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