Un policía de Hidalgo fue detenido junto con un cómplice suyo en un predio donde tenían almacenados 10 mil litros de hidrocarburo robado, en donde además había una toma clandestina conectada a un docto de Pemex desde donde ordeñaban combustible.
Excélsior informó que los hechos se dieron sobre la carretera Pachuca-Tulancingo, a la altura del retorno de San Juan Tizahuapan, del municipio de Epazoyucan, en la zona metropolitana de Pachuca, Hidalgo.
Las autoridades detectaron una toma clandestina de 14 pulgadas en un ducto de Pemex, con una manguera de aproximadamente 200 metros que estaba conectada a lugar que afuera decía “Restaurante Familiar d’Max”.
Al inspeccionar el lugar se aseguraron 10 mil litros de hidrocarburo, en contenedores de diferentes tamaños, y se arrestó al agente Oscar Martín L.P., de 24 años, quien se identificó con una licencia como elemento de la Agencia de Seguridad Estatal de Seguridad; además se aseguró a José Antonio L.R, de 34 años de edad