REINO UNIDO.- Lucy Ogilvie, de 40 años de edad y originaria del Reino Unido, murió luego de 4 años de padecer cáncer de intestino, pero los médicos que la atendieron durante ese tiempo le decían que simplemente eran hemorroides.

Fue por ese motivo que la enfermedad real se extendió y avanzó, y cuando le fue detectado, a pesar de que logró sobrevivir más tiempo del esperado, finalmente la mujer falleció dejando a dos hijas de 7 y 2 años de edad.

La mujer sufrió por cuatro largos años fuertes dolores, y cada vez que iba con médicos y explicaba que sus heces siempre estaban manchadas con sangre, le diagnosticaban simplemente hemorroides y se le trataba por ese supuesto padecimiento.

Sin embargo, en mayo de 2019, cuando los dolores se volvieron severos e insoportables, y tras sufrir inflamación de estómago, fue diagnosticada finalmente con cáncer de intestino, y se le indicó que no viviría más allá de diciembre de ese mismo año.

La mujer decidió abrir una campaña para recaudar fondos vía “GoFundMe”, y tratar de iniciar un tratamiento en el Reino Unido que le permitiera extender su vida más allá del terrible diagnóstico.

La publicación decía: “Soy Lucy, una madre de 40 años de 2 hermosas hijas (7 y 2). En mayo de 2019 recibí el diagnóstico devastador de cáncer de intestino en etapa 4 que se había extendido ampliamente por todo mi hígado. También tengo una mutación muy rara que hace que mi cáncer sea muy agresivo. En ese momento me dieron un pronóstico de mejor escenario de 20 meses, lo que me llevará a este mes de diciembre. Pero estoy desesperada por superar esto por el bien de mis hijas y de mi maravilloso esposo Iain”.

Su vida, efectivamente, logró extenderse hasta después de diciembre, pero luego de luchar, esta señora falleció el pasado 7 de septiembre, según comunicó su esposo Iain en la página de “GoFundMe”.

Explicó que “en los días previos a su muerte hubo varias complicaciones, como presión sanguínea baja y fallo del hígado, entre otras, que, finalmente, condujeron a la pérdida de conciencia. Su cuerpo no pudo superar los golpes constantes”.

Antes de su fallecimiento, la mujer fue entrevistada por el periódico Daily Mirror, en donde relató que por cuatro años le contó a los médicos los problemas de salud que tenía, pero el diagnóstico era el mismo: hemorroides, y ante tal negligencia pidió a los doctores que estuvieran alerta, pues el cáncer de intestino se diagnostica cada vez más en jóvenes.

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