Las llamas consumieron a toda velocidad una casita de láminas en la colonia El Roble y el fuego arrasó con todas las pertenencias de una familia, que se quedó prácticamente en la calle y sin perro que le ladre.
Según las primeras averiguaciones, se presume que el fuego inició por un cortocircuito alrededor de las 2 de la tarde, en este predio de la calle 39 con 22 de la mencionada colonia.
Los vecinos, al ver las llamas, avisaron a los servicios de emergencia y de volada acudieron elementos del cuerpo de Bomberos, que soltaron chorros de agua para apagar la candela.
Afortunadamente, al momento del incendio no había ninguna persona en el interior de la casita de dos piezas, sólo estaba el perrito de la familia, el cual quedó atrapado y lamentablemente pereció.
Ayudados con una pipa, los tragahumo sofocaron el fuego, pero el voraz incendio no dejó nada a su paso y consumió el patrimonio de una humilde familia (fotos J. Pallota).