En un procedimiento abreviado, Gerardo Osorio Estudillo fue sentenciado a 18 años de prisión por violar a la hija de su pareja sentimental, en varias ocasiones entre 2012 y 2014, en un predio en la colonia Emilia Zapata Sur III de esta ciudad.
La audiencia realizada en el Centro de Justicia Oral de Mérida y que fue llevada por el juez primero de control Kenny Burgos Salazar, estuvo plagada de interrupciones por parte del ahora sentenciado, a quien incluso le llamó la atención el agente de la Policía Procesal, a lo que el sujeto le dijo “que se estaba pasando de chingón y lo estaba acosando”.
El pacto entre el acusado y la fiscalía estuvo cerca de ser rechazado por el juez Burgos Salazar, pues casi al final de la audiencia el sentenciado aseguró: “No violé a mi hija, pero tengo que aceptar porque si voy a juicio voy a pasar 35 años en la cárcel”.
Uno de los requisitos para el procedimiento abreviado es que el acusado acepte su responsabilidad en los hechos que se le imputan.
Este individuo estuvo prófugo de la justicia cerca de dos 2 años, pues los hechos fueron descubiertos en 2017 cuando detenido en agosto de 2018 por agentes de la Policía Estatal de Investigación.
Los hechos
En la causa penal, que es la 195/2017, se precisa que los ataques ocurrieron en repetidas ocasiones en un domicilio en la colonia Emiliano Zapata Sur II; el primero de ellos en agosto de 2012 cuando la víctima, de entonces 11 años, dormía en el suelo de la vivienda y el ahora imputado trató de sodomizarla, pero como la niña se defendió no pudo consumar la agresión.
Luego, en 2014, este sujeto realizó varios ataques sexuales a la menor, que entonces contaba con 14 años de edad, hasta que la madre y el ahora sentenciado se separaron, pero en 2017 intentaron regresar y fue cuando la víctima contó a su madre sobre los ataques sexuales.
El agresor, quien le tiene dado los apellidos a la menor, se dio a la fuga hasta que fue detenido por la Policía Estatal de Investigación.