La noche del pasado sábado, poco después de las 21:00 horas, una mujer de Ticul quería acabar con su existencia, pues la desesperación y la impotencia de resolver sus problemas familiares la llevaron a ingerir un trago de ácido muriático.
Pero gracias a que sus parientes la vieron a tiempo cuando “bebía” el ácido y dieron aviso a la Policía Municipal ticuleña, la corporación a su vez dio aviso a paramédicos de la Cruz Roja, que atendieron a la doñita.
La frustrada suicida es Yamili del Rocío G. A., de 50 años de edad, quien llevada al Centro de Salud para su valoración médica y de ahí trasladada a Mérida, ya que su salud se reporta como grave.