Rollo: Heródoto Sierra
—Para despedir el año chitos… sólo para despedir el año… Sí, ya sabemos que se cayó el helicóptero de Rafael y Martha Erika y es, claro, una desgracia… Sí, ya sabemos que los de la derecha y los del centro quieren culpar al Pejepresidente que se defiende como gato boca arriba… ¡No mamen, cómo que él mandó a derribar la naval!
A ver, vamos a ponerle un poquito de sentido común, poquito, no mucho… Los principales adversarios de Rafael y Martha Erika, en ese orden, fueron los de Morena, López Obrador y Barbosa, el candidato a gobernador por Puebla, que perdió la elección en condiciones… digamos, sospechosas. Bien, el caso se fue a tribunales, hasta la última instancia, que ratificó el triunfo de Rafael y Martha Erika, en ese orden.
Barbosa no lo aceptó, el Pejepresidente tampoco, pero se dijeron respetuosos del fallo. O séase, eran adversarios, no enemigos. Hasta ahí bien. ¿Ni el Pejepresidente ni Barbosa tendrían sentido común como para concluir que cualquier cosa que pasara con Rafael y Martha Erika, en ese orden, los inculparía a ellos por ser sus más cercanos adversarios o rivales?
¡Por favor!.. pero está bien, lo entendemos todos… los panistas, algunos priistas, y otros adversarios del Pejepresidente, están tratando de convertir el accidente, la fatalidad y desgracia, en guerra sucia contra el Pejepresidente. Es una barbaridad, claro, pero también es parte de la ruindad que no pocas veces encontramos en la historia política de México.
—Hace años, les cuento, Rosa María Martínez Denegri era el brazo ejecutor del Negro Sansores Pérez en Campeche, quien operaba para hacerle la vida de cuadritos al gobernador Echeverría Castellot (Condorito y dicho sea con todo respeto para El Chino May, defensor de la moral y las buenas costumbres priistas).
Confrontados, Sansores a través de Martínez Denegri desequilibraba al gobierno de Condorito, que también se defendía y terminó triunfando pues fue elemento para la caída política del Negro. Antes, a alguien del gobierno de Condorito se le ocurrió devolver el hostigamiento y le pusieron “cola” a Martínez Denegri.
Molesta porque policías judiciales la seguían a todos lados, Martínez Denegri se quejó con el propio Sansores y lo puso en conocimiento de Condorito. Dicen que éste respondió: “Pero cómo creen que es hostigamiento, sólo cuido a Rosita para que no le pase nada, yo soy el primer interesado en que esté bien… pues si le pasa algo a mí me van a echar la culpa”… Y Martínez Denegri hasta lo agradeció, dicen.
—Y bueno, ahora sí, nos despedimos este año… Muchas gracias por leernos, por compartirnos, también por criticarnos y hasta por mentarnos la madre porque eso nos indica que nos están leyendo.
Sigan leyendo El Oráculo que, aclaramos, se puede convertir en el “ora… culo” si usted lo prefiere o desea. Total que aquí con estos maistros de Cauce Campeche gozamos de total y absoluta libertad de expresión, que pocos conocen en otro medios locales.
Sea pues… ¡Felicidades y próspero Año Nuevo!.. jejeje… ya ven que también caemos en esas tradicionales ridiculeces.