Rollo: Heródoto Sierra
–¿Cómo que ya no tenemos reina del carnaval? ¡Ya nos cargó el payaso! ¡T0d0 nos puede pasar… toooodoooo es toooodoooo, o séase que se reconcilien Elibebé y el Gober nuestro, que desaparezcan las empresas fantasmas del Congreso (jijijiji), que la Márquez y la jefa Yola suelten el botín del PAN, que el senador Ostoa y Zavala fumen la pipa de la paz, que Pino se ponga a trabajar y publique algo en la UAC, vaya hasta que el PRI pierda la próxima gubernatura, pero que no tengamos reina del carnaval! ¡Oigan nooooo!
¡Aquí ya sí me encabroné!.. La paloma debe dar una explicación… (ah cabrón, ya la dio jejeje)… La reinita, que dicen se peleó con el reyecito, jijiji, debe recibir su millón de pesos para que regrese… Ah no, verdad, es mucha lana y Elibebé la necesita para seguir bacheando calles e ir a los informes de los gobernadores del país… jejejejeje.
Eso sí, parece que los demonios de la carne, del carnaval, ya se desataron antes de tiempo y rondan las oficinas del Palacio Municipal… ahí están ya todos los opinólogos carnavalescos, los de pluma educada, los de pluma fácil, los vivales y hasta uno que otro retrasado mental que usa las redes para “defender” todo lo que está en contra de Elibebé, hablando del carnaval de Campeche y la decisión de la reinita de renunciar al reino de San Francisco de Campeche.
–También nos encontramos uno que otro reflexivo, pocos, poquitos, poquitititos, que ven el carnaval como lo que es: una fiesta del pueblo, que gobernadores frustrados por falta de alcurnia (léase Lalo Carrillo), escuchando el canto de las sirenas (léase Castilla Magaña y otros) se lo arrebataron a los barrios y colonias para entregárselo a Televisa y sus conductores de quinta que venían a Campeche como colonizadores, con familia, perro y perico, a disfrutar de nuestra gran gastronomía desde una semana antes del carnaval y hasta una semana después, claro, ¡con cargo al erario!
–Ya ven lo que son las cosas… El Pejepresidente acaba de darle en toda, en toditita la madre a la reforma educativa de Peña Nieto y nosotros hablando de una reinita que renunció al reino de San Francisco de Campeche (jijijiji)… Aaaah, pero si nos hicieron caso y regresaran el carnaval al pueblo, a los barrios y colonias, a los mercados, a la pintadera en todos lados y no sólo en un lugar, entonces regresaría la tradición… Y sí, que chinguen a su máuser Televisa y los cantantes de quinta que traen para seguir idiotizando a nuestro querido pueblo…
Claro, decía un gobernador cuya característica principal era su enorme panza, ahora los campechanos ya acostumbrados a que les traigan cantantes y grupos famosos, se quejan y exigen que cada vez sean más famosos, que cobran más millones y que, íntegramente, salen del erario… O séase, que sabemos que el carnaval como está concebido hoy es un gasto, un enorme gasto, que debería ser utilizado en estos tiempos, por ejemplo, para comprar medicinas y reparar hospitales como el llamado de Especialidades que, dicha sea la verdad, está pal´perro.
–¡Nos acabamos el espacio y no hablamos más que de la reinita que renunció al reino de San Francisco de Campeche y del carnaval!.. jajaja… o séase, ¡somos tan frívolos como muchos! Jajajaja.