Vaya que le saldrá “caritsimo” un pestañazo al trailero Alfonso V. V., pues se llevó de corbata a dos naves estacionadas, que quedaron listas para venderse por kilo en la chatarrería, luego que fueran aplastadas contra unos predios en Umán.
Según datos recabados en el lugar del desmaye, don Alfonso salió de Poxilá con rumbo a Umán al mando de un mastodonte de lata, pero quizás por los chemes y la mala noche pestañeó por unos segundos, suficientes para perder el control de la pesada unidad y estrellarse contra dos vehículos estacionados.
El trailer se azotó contra un Gol placas ZAN-618-B, propiedad de José E., el cual arrastró por varios metros y después se impactó contra una camioneta tipo Ranger con matrícula YN-3847-A, de Francisco V.
En su loca carrera mientras arrastraba ambos vehículos, éstos fueron apachurrados contra los muros de dos casas, las cuales también sufrieron daños.
El auto compacto quedó completamente destrozado y prensado entre una pared y un árbol, dejándolo como pérdida total.
En tanto la camioneta quedó dentro de un predio y sobre una albarrada, también quedó como pérdida total.
El trailero dormilón fue detenido por elementos de la Policía Municipal Coordinada de Umán, que llegaron en friega al lugar de los hechos para ver que peks sucedió.
Afortunadamente solo se registraron un chorro de daños materiales pero ningún lesionado, ya que los propietarios de las naves se encontraban en sus casas pateando la pared mientras descansaban en sus hamacas.