Rollo: Ambrosio Gutiérrez Pérez
El alcalde de Campeche, Eliseo Fernández, subió un escalón político este domingo por la noche. En su “informe semanal”, el tercero, además de comunicar sus acciones y las irregularidades que está encontrando en las áreas administrativas, hizo un reconocimiento al gobernador Moreno Cárdenas por ser su aval para descongelar las cuentas del Ayuntamiento desde el gobierno del panista Carlos Ernesto Rosado Ruelas.
Explicó que las cuentas municipales fueron congeladas por el Sistema de Administración Tributaria porque no pagaron el Impuesto Sobre la Renta de los Trabajadores. Y bueno, tampoco se sabe dónde quedó. Se investigará, dijo, pero, pero, pero… ya pasaron seis años.
Ya veremos qué ocurre con ese tema, y otros (falta de recursos económicos fundamentalmente) que tienen a la administración de Fernández caminando en el equilibrio por los muchos conflictos que le pueden reventar en las semanas próximas, incluyendo el tema de los aguinaldos pues, según su propia revelación, sólo le dejaron 10 millones y le faltarían 30 más.
El punto es que Fernández ya habló con Moreno Cárdenas (aunque haya sido por la vía del WhatsApp) y el agradecimiento expresado públicamente cambia muchas cosas, pero más que nada muchas percepciones. Se sabía de la confrontación, de la renuencia de Eliseo a respetar la autoridad de Moreno Cárdenas, y son públicas sus promesas de hacer mucho con poco, por su cuenta.
Se sabe además del rabioso rechazo, público y privado, de las huestes y colaboradores de Fernández a todo lo que huela a Moreno Cárdenas y Garo Hernández (ni se diga) el ex alcalde, al que le prometió ajuste de cuentas; y lo que sabe ahora, desde la noche de este domingo, es que ya hablaron y ya uno le agradeció al otro. Esa es la política.
Por supuesto, como en el caso de López Obrador y Peña y los priistas y los empresarios y todos los de la “mafia del poder”, este lunes muchos simpatizantes de Fernández que se desgarraban las vestiduras, que marcharon con el puño en alto lanzando consignadas contra Moreno Cárdenas, estarán algo más que molestos (¿encabronados se podría decir?) porque el muchacho rebelde que le ganó la capital al PRI como nunca antes … ¡negoció!
Lo dijimos aquí hace algunos días: no es lo mismo gritar olé que capotear al toro. Fernández empezará a perder varios de los puntos que ganó y, acaso, ganará algo de experiencia política. Con el descongelamiento de las cuentas municipales evitará muchos aprietos, podrá resolver algunos problemas. Entre los suyos habrá quiénes lo entiendan, muchos otros no.
No hay pureza en la política, no hay atención social que se resuelva sin dinero, pero los teóricos puristas también podrían caer en la chacota: ¿“no que no tronabas pistolita”?
Rendijas
—Tal vez deberían informar mucho más qué significa el hombre alado instalado en el malecón. La gente del pueblo, los que no son del círculo rojo, todavía no saben.
—Avanza el “éxodo” de centroamericanos por territorio mexicano (7 mil ahora). Trump, que alabó a México por desplegar fuerzas policiacas en nuestra frontera sur para detenerlo, ya tuiteó la mañana de este lunes lamentando que siempre no. Y El Peje, fiel a su dicho, ya reiteró que se ayude y proteja a esa caravana, además de mantener su oferta de visas y empleo.