Por andar sin la precaución debida, a un conductor se le hizo bolas el volante y armó buen relajito allá en el Campestre.

Redacción/De Peso
MÉRIDA, Yucatán.- A causa de la llovizna que estuvo bañando desde temprano las calles de Mérida, el conductor de una camioneta de redilas perdió el control de su nave, dio un giro de casi 360 grados, se subió a un camellón y de un golpe logró que la luminaria de un poste se viniera al suelo.

Este curioso accidente se registró ayer por la mañana, sobre la avenida Campestre con Prolongación Paseo de Montejo, de la colonia Campestre.

Resulta que el guiador de la camioneta de redilas con placas YR1460A transitaba de poniente a oriente sobre la avenida Campestre y al llegar a la glorieta en donde empieza Prolongación Paseo Montejo, como tenía verde, siguió su trayectoria con cierta velocidad.

Al incorporarse a la Prolongación Montejo, que corre de sur a norte, la nave patinó por lo mojado del pavimento, su conductor volanteó y después de dar un “trompo” de casi 360 grados, se subió al camellón.

Para no hacerles más largo el chisme, detuvo su marcha al golpear contra un poste de metal de alumbrado público, desprendiéndose su lámpara.

Por fortuna, no hubo lesionados, salvo daños materiales en la camioneta, el camellón y el poste, de los que se tendrá que encargar la compañía de seguros del guiador.